#SaveRalph es una campaña de Human Society International que muy probablemente ya hayas visto y si no, acá te dejamos el vídeo:
Reflexiona un poco y antes de seguir leyendo esta nota danos tu opinión al respecto en los comentarios.
Ahora queremos hablar de como algo tan bien hecho como la campaña de #SaveRalph genera consciencia a través del ruido y la división en redes sociales. ¿A qué nos referimos?
Los comentarios en las diferentes plataformas se han visto divididos, se han creado memes al respecto, probablemente hasta haya habido amistades que se hayan fracturado un poquito por estas opiniones encontradas.
El dilema está en la congruencia de compartir o solo por subirse al tren, cuando probablemente la mayoría de las personas que lo compartieron se fueron a cenar algún tipo de alimento producido con carne animal o porque lo compartieron desde un celular fabricado con explotación o (inserte aquí su incongruencia). Se nos ocurre que nosotros podríamos decir: ¡Ah, pero eso sí! bien preocupadxs por Ralph, pero destruyendo el mundo con su ropa fast-fashion.
Pues bueno, no. No se trata de eso.
Lo hermoso de algo tan, pero tan bien hecho como la campaña de #SaveRalph, es que nos permite expandir nuestra consciencia a partir del diálogo, el debate y la réplica.
Claro que nadie está poniendo en juicio que si está bien o mal practicar con animales. Eso está mal y punto. Moralmente la mayoría de las personas lo sabemos, aún aquellos que usan los productos que lo hacen a sabiendas.
Lo interesante es la polémica que se va entramando, que hace estallar y denotar que cada vez más personas están preocupadas por temas de explotación, violencia animal, veganismo, comercio justo, sustentabilidad, etc.
Ojo acá: La mayoría de las cosas que consumes traen algún tipo de estos problemas atrás e igual las sigues consumiendo ¿o no?
Porque quiénes son veggies y alzan la voz diciendo que: "Qué incongruencia cuándo siguen comiendo animales", probablemente lo estén publicando vestidos con prendas de polyester que año con año matan ecosistemas marinos. Y aquellxs que dicen: " Y lo comparten desde un celular fabricado por niños chinos explotados", Lo hizo antes o después de comerse unos tacos o algún otro animalito.
Y es precisamente eso lo hermoso del asunto... al debatir sobre esto o simplemente leerlo o mencionarlo, se genera una concientización y en la misma comienzan los cambios.
Lo es porque es posible que alguien que haya leído el comentario de alguien que es vegetariano/a diga: "Es cierto" y tal vez sea esa la semilla que después provoque, no que vaya a ser vegetariano o vegano, pero que quizá deje de comer carnes 3 veces a la semana.
O a lo mejor alguien comienza a investigar sobre la trazabilidad de la producción de su celular o de su ropa o a investigar si el maquillaje, shampoo, etc, está testeado en animales.
El punto acá es: viva la expresión y el debate, pero no nos juzguemos unos a otros.
Que más nos encantaría que todo el mundo vistiera moda sustentable, pero sabemos que el camino es largo y hay décadas de hábitos que sin querer se han vuelto parte de nuestra vida, no obstante informar y tratar de concientizar sobre el problema al mismo tiempo que se ofrecen soluciones es un buen comienzo.
Sigamos hablando de estos temas, somos la generación que va a cambiar al mundo.
Investiga, reflexiona y selecciona.
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